AMP PARTICIPA EN LIMPIEZA DE PLAYAS
Cerca de siete toneladas de desechos se recolectaron este sábado 21 de septiembre durante una jornada de limpieza de playa en la comunidad de María Chiquita, provincia de Colón y en el Río Juan Díaz, en la ciudad capital.
Directivos y colaboradores de la Autoridad Marítima de Panamá (AMP), se sumaron a esta iniciativa tanto en el Caribe panameño, como en el Río Juan Díaz.
La limpieza en Colón fue organizada por las Comisiones de Gestión Educativa, Protección Ambiental y Asuntos Comunitarios de la Cámara Marítima de Panamá, mientras que la recolección en Juan Díaz fue dirigida por la Asociación Adopta Bosques y contó con la participación de autoridades locales, estudiantes y asociaciones civiles que se han sumado a la celebración del Mes de los Océanos.
Panamá, al igual que muchos otros países costeros, es parte de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (UNCLOS). Este instrumento internacional establece un marco legal integral para todos los aspectos relacionados con el uso de los océanos, desde la navegación y la pesca hasta la protección del ambiente y la explotación de los recursos marinos.
“Al ser signatario de la UNCLOS, Panamá se compromete entre otras cosas a: proteger el medio marino. En tal sentido está obligado a tomar medidas para prevenir y controlar la contaminación marina, proteger los ecosistemas marinos vulnerables y conservar la biodiversidad marina” señaló la Directora General de Registro Público de Propiedad de Naves (DGRPN), Marta Aparicio, quien lideró el grupo de voluntarios que se sumó a la limpieza de las playas de María Chiquita.
Por su lado, Max Florez, director general de Puertos e Industrias Marítimas Auxiliares, acudió con otro grupo de colaboradores de la AMP a la limpieza en el Río Juan Díaz. Florez señaló que “la implementación efectiva de la UNCLOS en Panamá, en lo que respecta a la protección del medio ambiente marino, requiere un esfuerzo conjunto de los gobiernos, las comunidades locales, el sector privado y la sociedad civil”.
Estas acciones de limpieza encajan con la Política Nacional de Océanos del Ministerio de Ambiente (MiAmbiente), el cual define la interacción entre actores públicos y privados relativa a la conservación, vigilancia y aprovechamiento sostenible de los océanos.
Uno de los principales retos en materia de preservación de ecosistemas marinos es la coordinación interinstitucional para una supervisión y control detallados de las amenazas a la sostenibilidad de los recursos y reacciones oportunas ante los efectos del cambio climático y las actividades humanas que impactan los entornos marino y costero.
Panamá posee una gran riqueza natural en sus regiones costeras y oceánicas, con más de 2900 kilómetros de extensión litoral en ambas vertientes. Datos del MiAmbiente revelan que nuestro país cuenta con unas 300 especies de corales, 814 especias de peces, más de 200 variedades de algas marinas, 37 de tiburones, y 33 especies de cetáceos.
PMA PARTICIPATES IN BEACH CLEANUP
Nearly seven tons of waste were collected on Saturday, September 21, during a beach cleanup event in the community of María Chiquita, Colón province, and along the Juan Díaz River in the capital city.
Directors and staff from the Panama Maritime Authority (PMA) joined the initiative both in Panama’s Caribbean region and at the Juan Díaz River.
The cleanup in Colón was organized by the Educational Management, Environmental Protection, and Community Affairs Commissions of the Panama Maritime Chamber, while the cleanup in Juan Díaz was led by the Adopta Bosques Association. It involved local authorities, students, and civil associations, all of whom participated in celebrating Ocean Month.
Panama, like many other coastal nations, is part of the United Nations Convention on the Law of the Sea (UNCLOS). This international instrument establishes a comprehensive legal framework for all matters related to ocean use, from navigation and fishing to environmental protection and the exploitation of marine resources.
“As a signatory to UNCLOS, Panama commits, among other things, to protecting the marine environment. In this sense, it is obliged to take measures to prevent and control marine pollution, protect vulnerable marine ecosystems, and conserve marine biodiversity,” said Marta Aparicio, Director General of the Public Registry of Ships (DGRPN), who led the group of volunteers that participated in the cleanup at María Chiquita Beach.
Meanwhile, Max Florez, General Director of Ports and Auxiliary Maritime Industries, attended the Juan Díaz River cleanup with another group of AMP staff. Florez noted that “the effective implementation of UNCLOS in Panama, in terms of marine environmental protection, requires joint efforts from governments, local communities, the private sector, and civil society.”
These cleanup actions align with the National Ocean Policy of the Ministry of Environment (MiAmbiente), which defines the interaction between public and private actors concerning ocean conservation, monitoring, and sustainable use.
One of the main challenges in preserving marine ecosystems is inter-institutional coordination to provide detailed oversight and control of threats to resource sustainability, as well as timely responses to the effects of climate change and human activities impacting marine and coastal environments.
Panama has significant natural wealth in its coastal and oceanic regions, with over 2,900 kilometers of coastline on both sides of the country. Data from MiAmbiente reveals that Panama is home to approximately 300 species of coral, 814 species of fish, over 200 varieties of marine algae, 37 species of sharks, and 33 species of cetaceans.